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Caléndula Plantas medicinales:
Caléndula

La caléndula es una planta perenne originaria del sur de Europa que junto al aloe vera y a la bardana destaca por sus propiedades beneficiosas para el cuidado de la piel.

Plantas Medicinales: Caléndula

La caléndula es una planta perenne que destaca por sus llamativas flores de color anaranjado intenso que se pueden encontrar en varios parques y decorando muchos balcones. Además, esta planta también destaca por sus propiedades y beneficios medicinales cuyas flores ya eran utilizadas en la antigüedad en todo tipo de remedios. Uno de los usos más habituales de la caléndula es para tratar afecciones dermatológicas pero también ofrece buenos resultados como antifúngico o para tratar trastornos de la menstruación.

Descripción

La caléndula es una hierba de escasa altura (entre 40 y 50 cm) que se distingue por sus grandes cabezuelas florares de color anaranjado intenso que florecen durante casi todo el año siempre y cuando las temperaturas no sean demasiado bajas.

La caléndula se utiliza como remedio vulnerario, emenagogo y analgésico gracias a sus propiedades para desinflamar, desinfectar y acelerar el proceso de cicatrización de las heridas.

Partes de la planta utilizadas

Las partes de la caléndula que se utilizan por sus propiedades medicinales son las flores y, en determinadas ocasiones, las hojas machacadas para tratamientos externos. Como es una planta que se puede encontrar durante todo el año se recomienda utilizar la planta fresca o seca durante el mismo año para que, de esta manera, no se pierdan sus principales propiedades medicinales.

Por su alto contenido en flavonoides, la caléndula, puede ayudar a mejorar la circulación y es eficaz para regular los ciclos menstruales de la mujer.

Propiedades Farmacológicas

Entre los principales componentes activos de la caléndula podemos destacar su aceite esencial, mucílados, flavonoides, saponinas, carotinoides y principios amargos.

Entre sus principales propiedades medicinales se pueden destacar:

  • Antiséptica
  • Vasodilatadora
  • Antiinflamatoria
  • Cicatrizante
  • Antiespasmódica
  • Vulneraria
  • Antiviral
  • Sudorífica
  • Antihemorrágica
  • Digestiva
  • Fungicida

Usos de la Caléndula

Principales usos de la Caléndula:

  • Antiinflamatorio:
    Tradicionalmente la caléndula se emplea para tratar las inflamaciones de la boca o la garganta como, por ejemplo, llagas en la boca, gingivitis y faringitis. También puede ser un buen coadyuvante en el tratamiento de la amigdalitis y de la úlcera de estómago y duodenos.
  • Regulador del ciclo menstrual:
    Las infusiones de caléndula pueden ayudar a regular el ciclo menstrual ya que pueden aumentar las menstruaciones escasas y disminuir los flujos demasiado abundantes. Gracias a que es una planta rica en flavonoides y quercetina puede restaurar los capilares y beneficiar la circulación del organismo. Además, por sus componentes analgésicos, también puede ayudar a aliviar los síntomas premenstruales.
  • Digestiva:
    La caléndula puede estimular la salida de bilis hacia el tracto digestivo y, de esta manera, mejorar el proceso de digestión. También puede ser de ayuda en caso de digestiones pesadas y para aliviar los retortijones gracias a sus propiedades antiespasmódicas.
  • Antibiótico natural:
    La caléndula posee propiedades antibacterianas, antimicóticas y antivirales que pueden ser de ayuda para tratar determinadas enfermedades.

Remedios de caléndula para uso externo:

  • Infecciones vaginales y candidiasis: Algunos estudios han demostrado que el aceite esencial y la tintura de caléndula tienen propiedades fungicidas contra algunas infecciones vaginales recurrentes como la candidiasis.
  • Conjuntivitis: Las compresas de caléndula aplicadas sobre los ojos hinchados, párpados inflamados y orzuelos tienen un efecto antiinflamatorio y antiséptico por lo que también pueden utilizarse para tratar la conjuntivitis.
  • Herpes: Mediante una loción cutánea a base de caléndula se puede tratar el virus del herpes simple.
  • Atrofia muscular: Como la caléndula contiene ácido salicílico, saponinas y terpenoides con efecto analgésico puede ayudar a tratar la atrofia muscular y la esclerosis múltiple mediante la aplicación de compresas con esencia de caléndula sobre la zona afectada.
  • Durezas en la piel: Mediante cataplasmas de hojas y flores machacadas de caléndula aplicados sobre callos o durezas de la piel se pueden ablandar y suavizar gracias a los mucílagos que posee esta planta.

Contraindicaciones e interacciones

La caléndula está reconocida como una planta segura para la salud pero se deben tomar precauciones en los siguientes casos:

  • Los expertos recomiendan evitar esta planta durante el embarazo y la lactancia ya que su efecto emenagogo o regularizador de la menstruación podría presentar algún inconveniente.
  • Muchas personas desarrollan una reacción alérgica solo por entrar en contacto con la caléndula por lo que, en dichos casos, la reacción alérgica se producirá con otras plantas de la familia de las compuestas.
  • El contacto con la planta fresca, especialmente con sus hojas, puede provocar dermatitis o sarpullidos en personas sensibles o alérgicas.
  • Por su contenido en taninos, potencialmente irritantes a nivel gastrointestinal, se deben evitar las dosis altas de caléndula y los tratamientos prolongados por vía oral.
  • Si se está tomando un tratamiento farmatológico se deberá consultar con el médico antes de tomar esta planta, pues algunos estudios han demostrado que esta planta aumenta el efecto somnífero de los sedantes convencionales.

Como tomar Caléndula

Como las aplicaciones y formas de tomar la caléndula son numerosas, a continuación, se muestra una lista con las formas de elaborar remedios en función del problema de salud que se vaya a tratar:

  • En infusión simple o mixta, asociada a otras plantas con las que se complementa o que potencian una acción determinada. Dos o tres tazas diarias.
  • En decocción de la planta seca, flores y hojas.
  • En tintura o macerado en alcohol. Entre 50 y 80 gotas tomadas en tres dosis diarias, mezcladas con zumo o agua.
  • La infusión y la tintura aplicada en compresas frías o tibias.
  • La tintura aplicada como loción limpiadora.
  • Macerado en aceite para la elaboración de oleatos de caléndula, muy eficaces en caso de quemaduras y otros trastornos de la piel.
  • El extracto líquido, en gotas, mezcladas en agua o zumo de frutas. Entre 30 y 50 gotas diarias.
  • La decocción o la tintura para aplicarlas en baños y lavados.
  • La infusión depurada para aplicarla en forma de gargarismo o colutorio bucal.
  • Ungüento de caléndula.
  • Mascarilla de caléndula para tratar el acné juvenil.

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