Luteína
La luteína es un tipo de carotenoide que protege la retina de los efectos dañinos del sol mientras que sus propiedades antioxidantes refuerzan el sistema inmune.
La luteína es un tipo de carotenoide muy apreciado por sus cualidades beneficiosas para prevenir la degeneración macular y las cataratas. Además, gracias a sus propiedades antioxidantes, también protege la retina de los efectos dañinos del sol. Como se puede encontrar en verduras y hortalizas es muy fácil cubrir las necesidades diarias de esta sustancia a través de la alimentación.
Definición
La luteína es un tipo de carotenoide que se puede encontrar en plantas, algas, bacterias fotosintéticas y en la yema de huevo. Este carotenoide está relacionado con el betacaroteno y con la vitamina A.
La luteína se considera una sustancia beneficiosa para los ojos por lo que es usada para prevenir enfermedades como la degeneración macular senil (DMS), las cataratas, tensión ocular y para la retinitis pigmentosa (enfermedad que afecta a la retina).
Es importante saber que la luteína es una sustancia liposoluble por lo que su absorción disminuye en el caso de que se ingieran vegetales sin agregado de grasa. Igualmente la absorción de los carotenos oscila en un 40 – 50%.
Principales propiedades de la Luteína
Principales propiedades de la luteína:
- Gracias a sus propiedades antioxidantes protege el organismo del ataque de los radicales libres.
- Protege la retina de los efectos dañinos del sol.
- Puede prevenir la degeneración macular y las cataratas.
- Protege la piel de la radiación solar y previene el envejecimiento prematuro.
- Ayuda a reforzar el sistema inmune y la comunicación celular.
- Puede ayudar a prevenir el cáncer de colon y de próstata.
Principales fuentes de Luteína
Las principales fuentes de luteína son:
- Brócoli
- Espinaca
- Maíz
- Yema de huevo
- Repollo
- Berro
- Perejil
- Lechuga
- Pimiento verde.
Contraindicaciones de la Luteína
Las necesidades diarias de luteína (6 mg/día) se cubren rápidamente con el simple consumo de verduras u hortalizas. Por lo tanto, un consumo sin control de suplementos de luteína puede ocasionar concentraciones excesivas de esta sustancia. Dicho exceso puede dar lugar a hipercarotenosis, que se caracteriza por una pigmentación amarilla de la piel.
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