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Plantas medicinales:
Achicoria

La achicoria es una planta de la familia de las asteráceas muy reconocida como sustituto del café pero que también posee varias propiedades beneficiosas para salud además de ser adecuada para tratar problemas del hígado y de la vesícula biliar.

La achicoria es una planta muy utilizada como sucedáneo del café pero también cuenta con varias propiedades beneficiosas para la salud. Entre dichas propiedades se pueden destacar que favorece las digestiones, que tiene un efecto diurético que ayuda en procesos de desintoxicación del organismo, también posee un leve efecto laxante que puede ayudar a combatir el estreñimiento, etc. En principio, suele consumirse la infusión de las raíces de la achicoria, que destaca por su sabor amargo e intenso, pero también se pueden mezclar las hojas con otras verduras para preparar deliciosas ensaladas.

Descripción

La achicoria (Cichorium intybus) es una planta herbácea perenne de la familia de las asteráceas que cuenta con más de un millar de géneros y más de 20000 especies. Esta planta, ha sido utilizada desde la antigüedad por sus propiedades medicinales y terapéuticas, especialmente para tratar problemas del hígado y la vesícula biliar.

La parte más usada de la achicoria es la raíz pero también pueden utilizarse sus hojas y el tallo para realizar cocciones o para ensaladas. Aparte de contar con excelentes propiedades alimenticias también puede ser usada como medicamento, ya que estimula el sistema nervioso y puede favorecer la concentración y la capacidad mental.

Principios activos de la Achicoria

Entre sus principios activos, destacan:

• Sustancias amargas (raíz): rica en intibina, lactucina, lactucopicrina y glucósidos amargos.
• Derivados triterpénicos (raíz): alfa y beta lactucerol.
• Gomas (raíz).
• Ácido esteárico, acético, clorogénico, isoclorogénico, linoleico, alfalinoleico, mirístico, palmítico, ácido dicafeiltartárico.
• Inulina.
• Fructosa.
• Cicorina.
• Esculetol (flores).
• Aminoácidos (hojas): treonina, arginina, triptófano, lisina, valina.
• Minerales: potasio, fósforo, calcio, hierro, magnesio.

Principales beneficios de la Achicoria

A continuación, se exponen los principales beneficios para la salud de la achicoria:

• Está indicada para el cansancio y la debilidad física.
• Tiene acción antibiótica.
• Favorece las buenas digestiones.
• Evita o combate la anemia ferropénica debido al hierro que posee.
• Es útil para combatir las infecciones de las vías respiratorias.
• Se utiliza para expulsar lombrices y otros parásitos intestinales.
• Es muy efectiva para eliminar o minimizar las hemorroides.
• Se utiliza para aliviar los dolores de cabeza.
• Estimula el apetito.
• Aplicada localmente puede combatir el acné además también favorece la cicatrización y curación de heridas, forúnculos y cortes.
• Tiene un suave efecto laxante que combate el estreñimiento.
• Es diurética, por lo que favorece la eliminación de líquidos y combate su retención y los edemas.
• Evita la formación de coágulos ya que estimula la circulación sanguínea y fluidifica la sangre.
• Tiene efecto sedante, por lo que combate el insomnio.
• Ayuda a eliminar los gases acumulados en el intestino.

Formas de consumir la Achicoria

Principales formas de preparación y consumo de la achicoria:

• En jugos: preparar la planta completa para su acción depurativa, desintoxicante y diurética.
• En cocimiento: para los problemas digestivos, de 5 a 10 g (2 cucharadas) en un litro de agua hirviendo; dejar hervir durante 5 u 8 minutos. Reposar de 5 a 10 minutos, colar.
• Cataplasma: sola o combinada con otras plantas, para heridas, verrugas o tumoraciones externas.
• En ensaladas: consumirla constantemente sin parar, al natural; es ideal para mantener sano el hígado y el sistema nervioso equilibrado, aunque también produce flatulencias y expulsión de gases.

Precauciones al tomar Achicoria

En principio, el consumo de cantidades normales de achicoria no debería dar lugar a ningún efecto secundario pero antes de consumir cantidades excesivas de esta planta se recomienda consultar con un médico. A continuación, se muestran algunas situaciones en las que su consumo excesivo no está recomendado:

• Durante el embarazo.
• En caso de padecer cólicos en el riñón, debido a que su concentración en oxalatos es alta.
• En caso de gota o artritis.
• En caso de padecer problemas para conciliar el sueño .
• Si se sufre de hipotensión o anemia.
• Si se tiene alguna úlcera en el estómago o intestino.