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Gastritis

La gastritis es una enfermedad inflamatoria que afecta a la mucosa que recubre el interior del estómago y que por lo general provoca síntomas como ardor, nauseas o indigestión; pudiendo estar causada por sustancias irritantes como los antiinflamatorios, la aspirina, el alcohol, etc. o por bacterias como la H. Pylori.

Gastritis

La candidiasis por lo general y con el paso del tiempo, suele causar varias dolencias relacionadas con el aparato digestivo como puede ser la gastritis. Aunque dicha infección suele relacionarse con la acción de la bacteria H. pylori existen casos en que la gastritis puede iniciarse por la acción de hongos como la Cándida o el Histoplasma. En aquellos casos en los que se padezca de candidiasis y, además, se haya producido una gastritis por Helicobacter pylori ésta no hará más que complicar nuestra recuperación pero "por suerte" muchos de los antibióticos naturales utilizados para tratar la infección por cándida también serán eficaces contra dicha bacteria.

¿Qué es?

La gastritis es una enfermedad inflamatoria (aguda o crónica) de la mucosa gástrica que recubre el interior del estómago, pudiendo ser producida tanto por factores internos como por factores externos.

Causas

Frecuentemente la causa de la gastritis suele ser una infección bacteriana por Helicobacter Pylori, aunque también existen otras causas como:

  • Irritantes gástricos.
  • Utilización de medicamentos como la aspirina y/o antiinflamatorios (AINES).
  • Exceso de alcohol.
  • Tabaquismo.
  • Ingestión de sustancias corrosivas o cáusticas.
  • Vómitos crónicos.
  • Radiación.
  • Exceso de secreción de ácido gástrico como el provocado por el estrés.
  • Pepsina.

Síntomas

Los síntomas son muy variados y suelen ser diferentes de unas personas a otras llegando, incluso, a haber personas que no sufren ningún tipo de síntoma. Los más comunes son:

  • Ardor de estómago.
  • Nauseas.
  • Vómitos.
  • Indigestión abdominal.
  • Hipo.
  • Pérdida de peso.
  • Sensación de distensión de la zona abdominal.
  • Vómitos con sangre de color negro o como si fueran posos de café.
  • Deposiciones negras.

Tipos

La gastritis se puede clasificar en los siguientes tipos:

  • Gastritis agudas:
    Se caracterizan por un proceso inflamatorio que puede ser temporal con la presencia de erosiones en la pared del estómago y, si las lesiones son muy severas, asociarse a sangrado.
  • Gastritis crónicas:
    Se caracterizan por una inflamación crónica de la mucosa del estómago que afecta inicialmente a zonas superficiales y glandulares. En el curso de su evolución presentan alteraciones degenerativas de las células epiteliales con reducción de la cantidad de glándulas (gastritis crónica atrofica) en las que pueden aparecer zonas de metaplasia intestinal (conversión de las glándulas del estómago en otras similares a las del estómago).

Tratamiento

En algunos casos puede llegar a resolverse sin haber iniciado un tratamiento específico En algunos casos la gastritis puede llegar a resolverse espontáneamente sin necesidad de realizar un tratamiento específico pero, cuando no sea así, existen diferentes tratamientos dependiendo de la causa. Para el tratamiento clínico el médico suele recetar antiácidos para ayudar a aliviar los síntomas y facilitar la recuperación. En aquellos casos de infección el médico optará por recetar antibióticos además de recomendar una dieta adecuada.

Cuando los síntomas no sean preocupantes puede ser suficiente con realizar una dieta adecuada evitando aquellos alimentos que sean irritantes así como evitar situaciones de estrés y, para aquellos casos de infección por Helicobacter Pylori, consumir antibióticos naturales como el ajo, jengibre, tomillo, etc.

Mediante estos sencillos consejos puedes mejorar los síntomas de la gastritis:

  • Evitar temperaturas extremas de alimentos y bebidas.
  • Evitar alcohol, bebidas carbonatadas, café y té.
  • Mastique y coma lentamente.
  • Fraccione sus comidas en pequeños volúmenes (desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena).
  • Consuma con moderación verduras flatulentas y productos integrales o con mucha fibra.
  • Se recomiendan cocciones sencillas (plancha, grill, horno, hervido).
  • Beba mucha agua.
  • Evitar la pimienta, mostaza y vinagre.

Para luchar contra la Helicobacter Pylori se recomiendan los siguientes antibióticos naturales:

  • Ajo.
  • Jengibre.
  • Romero.
  • Tomillo.
  • Regaliz.
  • Própolis.
  • Cebolla.
  • Menta.
  • Echinacea.
  • Cúrcuma.

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