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Hipotiroidismo

El hipotiroidismo se caracteriza por la disminución de la actividad funcional de la glándula tiroides y el descenso de secreción de hormonas tiroideas provocando aumento de peso, intolerancia al frío, problemas de memoria, uñas quebradizas, etc.

El hipotiroidismo es un trastorno que resulta de la insuficiente actividad hormonal tiroidea que es necesaria para mantener las funciones metabólicas normales del organismo. Generalmente este trastorno puede ser producido por una afectación de la propia glándula tiroidea (hipotiroidismo primario) o por alteraciones en la producción o secreción de la tirotropina (TSH) hipofisaria por causas a este nivel o en el hipotálamo (hipotiroidismo secundario o terciario). Pero también hay otras condiciones más raras que pueden conducir a hipotiroidismo como, por ejemplo, la candidiasis.

¿Qué es el hipotiroidismo?

El hipotiroidismo es una enfermedad que se caracteriza por la disminución de la actividad funcional de la glándula tiroides y el descenso de secreción de hormonas tiroideas. Dicho déficit de hormonas tiroideas puede deberse a una producción deficiente o bien por su resistencia a su acción en los tejidos diana, alteración de su transporte o de su metabolismo.

Causas

Las causas del hipotiroidismo suelen estar relacionadas con factores ambientales como el yodo de la dieta, bociógenos (compuestos químicos que bloquean la absorción y utilización del yodo), genética, etc.

Las causas más comunes que pueden originar esta enfermedad pueden ser:

• Tiroiditis de Hashimoto o autoinmunitaria: consiste en la destrucción progresiva del tiroides debido a que el propio organismo actúa como si no reconociera el tiroides procediendo a su destrucción por medio de anticuerpos que produce el sistema inmune. Es muy común en mujeres a partir de los 40 años aunque puede darse también en varones y a otras edades.
• Tiroides posparto: la mayoría de las veces no se diagnostica ya que este tipo de hipotiroidismo suele ser asintomático. La mujer afectada sufrirá primero hipertiroidismo y posteriormente hipotiroidismo, recuperando el funcionamiento normal de la glándula tiroidea al cabo de un año.
• Defectos congénitos como el hipotiroidismo congénito (el recién nacido presenta hipotiroidismo) o el hipotiroidismo adquirido en el periodo neonatal (el hipotiroidismo se desarrolla poco después del nacimiento).
• Terapias de radiación para el tratamiento del cáncer.
• Extirpación quirúrgica de parte o toda la glándula tiroidea.
• Tiroiditis granulomatosa subaguda: aparece después de una infección vírica. Suele comenzar con una inflamación de garganta con presencia de dolor en el cuello. Dicho dolor aumenta de intensidad con el paso del tiempo y suele ir acompañado de fiebre ligera.
• Medicamentos antitiroides: algunos tratamientos con medicamentos como el carbinazol, metimazol o propiltiouracilo pueden paralizar la síntesis de hormonas tiroideas y/o generar anticuerpos llegando a provocar hipotiroidismo.
• Tratamiento con litio empleado en casos de problemas de psicosis maniaco-depresivas.
• Carencia crónica de yodo en la dieta.

Factores de riesgo

Los siguientes colectivos pueden ser más propensos a desarrollar esta enfermedad:

• Mujeres mayores de 50 años.
• Mujeres en el periodo de posparto.
• Personas sometidas a una cirugía de la tiroides o aquellas que siguen terapias con yodo radiactivo.
• Recién nacidos de madres hipertiroideas.
• Personas con anticuerpos antitiroideos.

Síntomas

Generalmente el hipotiroidismo no presenta síntomas significativos en sus inicios. Además, los síntomas variarán dependiendo de la causa, duración y gravedad del hipotiroidismo.

Los síntomas más comunes del hipotiroidismo pueden ser:

• Las expresiones faciales son toscas, la voz ronca y la forma de emplear las palabras para formar oraciones es lenta.
• Los párpados suelen estar caídos y los ojos y la cara presentan un aspecto hinchado y abultado.
• Muchas personas sufren un aumento significativo de peso además de padecer de estreñimiento.
• Incapacidad para tolerar el frío.
• El cabello tiende a volverse ralo, áspero y seco además la piel suele volverse áspera, gruesa, seca y escamosa.
• Las uñas tienden a volverse quebradizas y débiles.
• En muchos casos se desarrolla el síndrome de túnel carpiano que provoca hormigueo o dolor en las manos.
• El pulso se vuelve más lento además de aparecer zonas un poco anaranjadas (carotenemia) en las palmas de las manos y plantas de los pies.
• Algunas personas, especialmente la gente mayor, se vuelven olvidadizas y parecen confusas o dementes.

Los síntomas más característicos de hipotiroidismo en un recién nacido son:

• Cara aparentemente hinchada.
• Mirada triste.
• Lengua larga que sobresale de la boca.

Los síntomas más característicos de hipotiroidismo en una mujer embarazada son

• Problemas oculares.
• Temblores en las manos.
• Hipertensión arterial.
• Bocio.
• Debilidad muscular.
• Defecación más frecuente.
• Separación de las uñas del lecho ungueal.

Tipos de hipotiroidismo

Existen tres tipos de hipotiroidismo que se clasifican como primario, secundario y terciario. A continuación se define brevemente cada uno de ellos:

• Hipotiroidismo primario:
  En este tipo de hipotiroidismo la glándula está afectada por lo que no funciona correctamente. Es el tipo de hipotiroidismo más frecuente. También puede aparecer bocio (aumento de la glándula tiroidea). En casos de bocio se pueden dar las siguientes posibilidades:
  • Que la función de la glándula tiroidea sea normal.
  • Que la función de la glándula tiroidea esté aumentada, y en este caso se trataría de hipertiroidismo.
  • Que la función de la glándula tiroidea esté disminuida (conocido como hipotiroidismo) a causa de déficit de yodo, por lo que presenta una relación directa con la dieta.
• Hipotiroidismo secundario:
  La glándula tiroidea se encuentra en perfecto estado pero, sin embargo, la hipófisis no secreta la hormona estimulante de la tiroides (conocida como TSH) por lo que la glándula tiroidea no produce las hormonas tiroideas. En este tipo de hipotiroidismo nunca aparece bocio.
• Hipotiroidismo terciario:
  Este tipo de hipotiroidismo depende directamente del hipotálamo, ya que el mismo no produce la hormona liberadora de tirotropina. Esto provoca que todo el conjunto se vea afectado, ya que sin dicha hormona la hipófisis no puede secretar TSH y, a su vez, la glándula tiroidea tampoco es capaz de secretar las hormonas tiroideas.

Tratamiento

Generalmente el hipotiroidismo requiere de terapia de por vida. Su tratamiento consiste en la reposición de la hormona tiroidea T4. Dicha terapia solo sustituye la hormona T4 y no la T3, ya que en condiciones normales la hormona T3 procede de la modificación de la T4.

Para restablecer la hormona tiroidea en el organismo se usa frecuentemente la levotiroxina. Que se prescribirá en la menor dosis posible necesaria para restablecer los niveles normales de esa hormona.

Para el tratamiento del hipotiroidismo se deben seguir una serie de pautas como las siguientes:

• En caso de que mejoren los síntomas no se debe abandonar el tratamiento hasta que el médico lo recomiende.
• Se recomienda usar siempre la marca de medicamentos recetada por el médico.
• Algunos cambios en la alimentación pueden afectar a la absorción del medicamento, sobre todo si la dieta es rica en soja o fibra.
• Es mejor ingerir el medicamento en ayunas.
• No se debe tomar el medicamento junto con calcio, hierro, multivitaminas, antiácidos de hidróxido de aluminio y/o colestipol.

En caso de que los síntomas evidencien un incremento de la actividad tiroidea se debe informar al médico o profesional de la salud. Algunos de esos síntomas son:

• Pérdida de peso rápida.
• Inquietud o temblores.
• Sudoración.

En caso de que el hipotiroidismo sea de causa autoinmune es posible que vaya asociado a alteraciones en otras glándulas como las suprarrenales, paratifoidea, gónadas, etc. Por lo tanto para tratar este tipo de hipotiroidismo será preciso tratar también dichas alteraciones.

En caso de coma mixedematoso será necesario administrar hormona tiroidea por vía intravenosa y medicamentos esteroides.

En caso de hipotiroidismo en los niños será importante restablecer estas hormonas ya que son imprescindibles para el crecimiento y para un desarrollo mental normal.

También se debe prestar especial atención a la dieta ya que el hipotiroidismo provoca una tendencia a aumentar de peso. Por ello, se debe mantener una dieta equilibrada baja en grasa y rica en frutas y verduras.