logo candidiasisweb

CandidiasisWeb

Menu

Citología Vaginal

La citología vaginal o prueba de Papanicolaou es una prueba microscópica que consiste en la toma de una muestra de células tomadas por raspado de la abertura del cuello uterino con el fin de analizar si existe cáncer o lesiones precancerosas.

Citología Vaginal

La citología vaginal, prueba de Papanicolaou o frotis vaginal es una prueba diagnóstica que sirve para detectar la existencia de cáncer en el cuello uterino. Para ello, es necesario tomar una muestra de células del cuello del útero mediante el raspado con una espátula. Esta prueba puede ocasionar pequeñas molestias pero no existe riesgo de infección y se recomienda realizarla cada tres años en el caso de que la mujer mantenga relaciones sexuales, ya que el cáncer de útero suele ser provocado por el virus del papiloma humano que se transmite por vía sexual.

¿Qué es?

La citología vaginal también se llama comúnmente frotis vaginal o test de Papanicolaou, en honor al médico griego Georgios Papanicolaou que desarrolló esta técnica en la primera mitad del siglo XX.

El objetivo de esta prueba es detectar la existencia de células anormales en el cuello del útero, es decir, de un estado previo al del cáncer o de lesiones precancerosas. En la mayoría de los casos el cáncer de cuello uterino se asocia a una infección por el virus del papiloma humano (VPH), que se adquiere por vía sexual. Esta prueba también sirve para detectar si hay algún tipo de infección o una inflamación que afecte a la buena salud de la mujer.

Cuándo se realiza esta prueba

En general se recomienda hacer una citología vaginal a los tres años del inicio de las relaciones sexuales, a partir de los 21-25 años y repetirlas al menos cada tres años. En el caso de que los resultados previos no sean del todo normales o si la mujer tiene algunos factores que puedan facilitar la aparición de tumores se puede recomendar hacer controles con más frecuencia.

No hay que hacer una citología vaginal a mujeres que no hayan tenido relaciones sexuales, ya que el cáncer del cuello del útero se asocia prácticamente siempre a la infección por el virus del papiloma humano que se adquiere por vía sexual. Por lo tanto, si no se han tenido relaciones sexuales no existirá una infección por dicho virus ni riesgo de cáncer del cuello del útero. Las mujeres de más de 65-70 años que no mantengan una vida sexual activa podrían no hacerse citologías en el caso de que tengan tres citologías normales en los últimos 10 años y que la última se haya hecho en los últimos 5 años.

No es necesario realizar citologías vaginales a mujeres que hayan sufrido una histerectomía total, es decir, una extirpación completa del útero por miomas u otras patologías no tumorales. Se seguirán haciendo citologías en el caso de que existan antecedentes de lesiones precancerosas o si el útero se ha extirpado a causa de un cáncer de cérvix.

Preparación para la prueba

Antes de realizar esta prueba es importante tener en cuenta:

  • Duración: para realizar esta prueba sólo son necesarios unos pocos minutos.
  • Ingreso: nunca requiere ingreso ya que esta prueba se hace de forma ambulatoria.
  • ¿Hay que ir acompañada?:no hace falta ir acompañada aunque puede ser de ayuda si hace que se sienta más relajada.
  • Medicamentos: no es necesario tomar ningún medicamento previo además puede seguir tomando su medicación habitual.
  • Comida: no es necesario ir en ayunas.
  • Ropa: puede llevar la ropa que desee, pero conviene que pueda desvestirse fácilmente de cintura para abajo.
  • Documentos: en general no es necesario llevar ningún documento.
  • Contraindicaciones: no conviene hacer la citología durante la menstruación pues la regla puede dificultar la interpretación de la muestra. No se realizan citologías en mujeres muy jóvenes o que no hayan tenido nunca relaciones sexuales.
  • Embarazo y lactancia: no contraindican la realización de la prueba aunque conviene comentarle al médico la posibilidad de que esté embarazada.

Cómo se realiza esta prueba

La citología vaginal dura apenas unos minutos además no debería resultar muy molesta y apenas tiene riesgos. Para realizarla la mujer se debe tumbar boca arriba en una mesa especial que facilita la exploración del área genital. Se inserta un espéculo en la vagina cuyas dos valvas se separan para permitir abrir la cavidad vaginal y observar el cuello del útero. Con una pequeña espátula y un cepillo se realiza un suave raspado en el interior y en la parte externa del cuello del útero. Se toman varias muestras que se extienden en un pequeño cristal para poder observarlas en un microscopio o se introduce la muestra en un líquido conservante para su examen posterior.

En principio, esta prueba no debería ocasionar ninguna complicación. En determinadas ocasiones puede existir un mínimo sangrado que cause un pequeño manchado vaginal pero el riesgo de que se produzca una infección es mínimo. La citología vaginal no es una prueba dolorosa pero la inserción del espéculo puede resultar molesta cuando la mujer no está relajada.

Resultados de una citología vaginal

Los resultados de una citología vaginal se informan de la siguiente manera:

  • Citología normal: no hay evidencia de células malignas.
  • Citología inadecuada: no se ha podido estudiar correctamente la muestra por lo que es necesario repetirla.
  • ASCUS: acrónimo que viene del inglés (atypical squamous cells of undetermined significance) y que se traduce como ‘atípica de significado indeterminado’. Este resultado es muy frecuente y significa que las células no son del todo normales, pero que los cambios que presentan no tienen un significado claro. Por lo tanto, es necesario un control más estrecho y en caso de que los cambios anormales empeoren puede requerir un tratamiento.
  • Lesión intraepitelial de bajo grado o SIL (squamous intraepithelial lesions) de bajo grado: Esto significa que se han encontrado células con cambios anormales debidos al virus del papiloma humano. Se llama intraepitelial porque son células que están dentro de la capa que rodea el cuello del útero o epitelio. Este resultado requiere de controles más frecuentes para examinar si se produce una evolución a células malignas.
  • Lesión intraepitelial de alto grado o SIL de alto grado: Son células con anormalidades grandes y una alta probabilidad de evolucionar a cáncer si no se realiza un tratamiento. A veces el SIL de alto grado clasifica a las células en varias categorías según el grado de anormalidad de las mismas. Estos cambios suelen requerir un estudio más completo y un tratamiento.
  • Carcinoma de células escamosas: Significa que se han detectado células cancerosas en la citología.

CONDICIONES DE USO DEL SERVICIO

La información facilitada en CandidiasisWeb no pretende en ningún caso sustituir a un servicio de atención médica, así como tampoco debe utilizarse con el fin de establecer un diagnóstico o elegir un tratamiento.

CandidiasisWeb no se hace responsable de las consecuencias derivadas de la automedicación ya que las recomendaciones sobre fármacos, técnicas, productos, etc. se citarán únicamente con una finalidad informativa.

Valora este artículo

Excelente
Bueno
Interesante
Mejorable